En el contexto de cualquier crisis económica, uno de los sectores de la población damnificados con el empleo siempre es el mismo: los mayores de 50 años. La Fundación Adecco lo corrobora con datos: quienes sobrepasan los 55 años representan el 15% del total de desempleados, un porcentaje que no ha dejado de subir (en 2015 eran el 11%). Y lo peor es que el 62% de ese sector de la población es parado de larga duración, esto es, lleva más de un año sin trabajar.
¿Acaso no valoran las empresas la experiencia, la responsabilidad, la madurez, la autoconfianza y el control emocional que se les presupone a los trabajadores más longevos? Parece que prevalecen otros clichés, como que los que superan los 50 son menos versátiles, tienen menos disponibilidad para viajar o para hacer horas extra y van a exigir sueldos mayores que los jóvenes.
“Se lleva unir a un profesional de gran experiencia con personas mucho más jóvenes”. —Mónica Pérez—
El panorama se ha puesto cuesta arriba con la pandemia, pero es importante que los profesionales que buscan empleo a partir de esa edad no caigan en el desánimo. “Una de las tendencias que estamos viendo en recursos humanos es la importancia de la diversidad del talento, de la comunicación de equipos multidisciplinares. No solo en cuanto al sexo y a la cultura, sino pluralidad de edades. Se lleva unir a un profesional de gran experiencia con personas mucho más jóvenes”, dice Mónica Pérez, directora de comunicación del portal de empleo Infojobs. Si se siente desorientado en la ardua tarea de encontrar trabajo pasados los 50 en un entorno laboral cada vez más exigente, le conviene seguir estos diez pasos que nos brindan los expertos en la materia:
1. Defina sus objetivos
En primer lugar, realice un trabajo de introspección y repase su perfil profesional. Pregúntese ¿a qué puesto de trabajo quiero aspirar?, ¿qué puedo aportar a una empresa?, ¿qué tipo de compañías ofertan un perfil similar al mío y qué competencias demandan? Ayuda escribir en un papel sus puntos fuertes y aquellos en los que necesita mejorar.
2. Recíclese
Hágase una pregunta más: ¿a qué cursos puedo optar para solventar mis carencias? “Yo recomiendo buscar siempre formación gratuita, porque hay muchísima, y dominar los programas informáticos (lo básico es el manejo fluido de Outlook y del paquete Microsoft Office, profundizando en Excel). Tanto en Oficina Empleo como en la Agencia para el Empleo de Madrid y de otras comunidades y en la plataforma Miríadax hay muchos cursos online de idiomas, de herramientas informáticas… Y al estar formándonos, ejercitamos la mente”, señala Delia Salinero, consultora de integración de la Fundación Adecco. Consulte también los cursos a través del SEPE (Servicio Público de Empleo Estatal), de los Ayuntamientos y de entidades de formación subvencionadas. Un error garrafal sería realizar cualquier curso. Lo ideal es implicarse en aquellos que le acerquen a sus objetivos.
3. Prepare el currículum
Nunca debe superar las dos páginas por una sola cara (si es una, mejor), así que ahórrese los detalles y vaya al grano, señalando aquello que aporte más valor. Comience con dos o tres líneas en las que describa brevemente su perfil y sus intereses actuales, para que valoren qué puede aportar y qué conocimientos tiene. A continuación, indique primero las experiencias más recientes y los puestos más cualificados o en los que haya estado más tiempo, describiendo no solo las funciones desempeñadas, sino los logros obtenidos (por ejemplo, la captación de un volumen de clientes muy significativa en una labor comercial).
Lo mismo con la formación, siempre en orden cronológico inverso. Incluya las fortalezas de su personalidad y prepare distintos currículums para ofrecerle a cada reclutador lo que busca. Puede que le pidan un videocurrículum, para verle y conocer su habilidad para comentar su perfil profesional, además de comprobar cómo se maneja con la tecnología, aunque el CV en papel sigue siendo necesario. Por cierto, déselo a alguien a quien no conozca mucho, para cerciorarse de que entiende su trayectoria profesional. Y no ponga la edad, porque muchos reclutadores pueden quedarse ahí y desechar su candidatura solo por ser mayor de 50.
4. Conozca el mercado laboral
¿Cómo se busca empleo hoy? Póngase al día inscribiéndose en plataformas online como Infojobs e Infoempleo y rellenando correctamente su perfil. También en las web de las Empresas de Trabajo Temporal (ETT). “Nosotros somos el reflejo del mercado laboral español –dice la portavoz de Infojobs–. No solo estamos ahí para conseguir un trabajo; también para revelar cuáles son los puestos más demandados y qué información es la que más se requiere hoy”. Según esta experta, una de cada dos empresas señala que la adaptación al cambio es una de las habilidades (o soft skills en inglés) que más valora entre sus profesionales. También se aprecia la capacidad de trabajar en equipo, de resolver conflictos y la proactividad.

5. Utilice las redes sociales
A la hora de buscar empleo, las más recomendables son Twitter y LinkedIn. Mantenga su perfil actualizado, escriba y comparta información, ofreciendo valor para hacer visible su talento y para dejar claro que está al día en su ámbito laboral.
6. Aumente su red de contactos
Eche mano de la agenda y haga una lista de las personas de su entorno que le pueden ayudar: amigos, excompañeros de trabajo, antiguos profesores, vecinos… Cuanta más gente sepa que busca empleo, mejor. Entrégueles su CV e intente hacer también algo por ellos.
7. Haga equipo
“Buscar trabajo es poco gratificante; resulta más ameno unirse a otras personas que están en la misma situación: en una fundación, en cursos o en talleres online o presenciales. Hay muchas entidades que los realizan para estar conectados”, dice Delia Salinero, de la Fundación Adecco.
8. Rompa clichés en la entrevista
Si en una entrevista de trabajo mencionan la sobrecualificación, hay que darle la vuelta al argumento: usted tiene un enorme potencial para adquirir nuevas capacidades que, unidas a la experiencia que acumula, serán garantía de éxito. Si le preguntan si le supone un problema tener un jefe más joven, responda con seguridad: los altos cargos no se consiguen por los años cumplidos, sino por las competencias y la responsabilidad demostrada. “Hay que asumir que la edad es un valor, y luchar contra las ideas preconcebidas sobre que la persona mayor es rígida y no está actualizada. La actitud es la base de todo, nos lo dicen las empresas. No quieren gente triste”, comenta Salinero. “Antes de hacer una entrevista, póngase una canción que le llene de energía, o lea una frase que le motive. Es fundamental un ánimo positivo”.
9. Mantenga el ánimo
Es importante trabajar la confianza en uno mismo, recordar los retos logrados anteriormente y creer en las propias aptitudes. No conviene descuidar las relaciones sociales porque son básicas para la salud emocional, así como rodearse de personas positivas con las que uno se sienta a gusto. No se trata de dedicar ocho horas al día a buscar trabajo. Es necesario hacer otras cosas, como voluntariado (que se puede realizar online y está muy valorado por las empresas, porque demuestra que una persona está comprometida con el entorno y sabe trabajar en equipo), actividades para mantenerse enérgico, hacer algo de deporte, caminar… “Muestre vitalidad, ganas de seguir aprendiendo y entusiasmo por nuevos retos”, recomiendan en Infojobs.
10. Pida ayuda profesional
Sobre todo si es un parado de larga duración, busque apoyo y orientación en fundaciones, asociaciones y organizaciones ad hoc. Le asesorarán y le pondrán en contacto con empresas. El objetivo es conocer a personas que le abran las puertas del empleo.