En España, más del 50 por ciento de las empresas alimentarias aún no se ha sumado a la nueva era digital, según un estudio de Altim.
La consultora tecnológica asegura que el sector de la alimentación ha sabido mantenerse estable pese a estos años de crisis. Concretamente, se sitúa a la cabeza en el ranking de industrias nacionales con una facturación que supera los 93.000 millones de euros, lo que supone casi el 3 por ciento del PIB anual. Sin embargo, su asignatura pendiente sigue siendo la inmersión en el proceso de transformación digital, ya que una de cada dos compañías todavía no cuenta con las herramientas necesarias para adaptarse al nuevo entorno tecnológico. En este sentido, Altim destaca la importancia de apostar por nuevos sistemas SAP, con el objetivo de que la tecnología se convierta en un aliado en la estrategia de negocio y no en un obstáculo.