Fecha de publicación
15 septiembre 2025

Clara Campoamor y su papel en la historia de Madrid

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8 min.
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Clara Campoamor se ha convertido en un símbolo de la lucha por los derechos políticos de las mujeres en España y en una figura ineludible para comprender la evolución democrática del país durante la primera mitad del siglo XX.

Su trabajo como abogada, su actividad legislativa en las Cortes de la Segunda República y su constancia en la defensa del sufragio femenino la sitúan entre las personalidades más relevantes de la historia contemporánea de Madrid. Este artículo repasa su vida, su trayectoria profesional y política, y la manera en que Madrid ha recordado y homenajeado su legado.

Quién fue Clara Campoamor

Orígenes y formación en Madrid

Clara Campoamor Rodríguez nació en Madrid en 1888 en una familia con recursos limitados. Desde joven mostró una determinación y una capacidad de trabajo destacadas, compatibilizó empleo y estudio para acceder a una formación que, en su tiempo, no estaba al alcance de muchas mujeres.

Comenzó su trayectoria en la enseñanza y más tarde se orientó hacia el Derecho, disciplina que le proporcionó herramientas para cuestionar normas y prácticas discriminatorias. Madrid, con su vida intelectual, sus instituciones y sus redes de activismo, fue el escenario donde se forjaron muchas de sus convicciones y donde desarrolló la mayor parte de su actividad pública.

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Su vida luchando por los derechos de las mujeres

La vida pública de Campoamor se definió por un compromiso sostenido con la igualdad. No se limitó a la denuncia, combinó la argumentación jurídica con la acción política y la actividad escrita para incidir en la opinión pública.

Trabajó por la mejora de las condiciones laborales de las mujeres, por el acceso a la educación y por la emancipación jurídica que permitiera a las mujeres actuar con independencia. Su mensaje persistente fue que la ciudadanía no podía ser una mera formalidad: los derechos debían poder ejercerse en la práctica, con instrumentos legales y sociales que garantizasen su efectividad.

Trayectoria profesional

Trabajo previo y acceso a la abogacía

Para costear sus estudios y sostener su autonomía, Clara desempeñó diversos trabajos antes de ejercer la abogacía. Esa experiencia le permitió conocer de primera mano las dificultades económicas y jurídicas que afectaban a las trabajadoras y a las clases populares. Acceder a la profesión de abogada no solo fue un logro personal, sino que le dio una autoridad técnica para argumentar reformas legales.

Desde la práctica profesional defendió a personas en situaciones vulnerables y utilizó el conocimiento jurídico para señalar las contradicciones de un orden que no protegía a las mujeres por igual.

Clara Campoamor como escritora sobre los derechos de la mujer

La escritura fue una herramienta estratégica en la obra de Campoamor. Publicó artículos, dio conferencias y mantuvo una actividad divulgadora que buscaba formar la opinión pública. Sus textos combinaban argumentos jurídicos con apelaciones éticas y pedagógicas: explicaba por qué la igualdad política y civil no era una concesión sino una exigencia de coherencia democrática.

La difusión escrita amplió el alcance de su acción, permitiéndole dialogar con lectores y lectoras diversos y facilitar la comprensión de reformas complejas.

Actividad política

Diputada en la Segunda República

La proclamación de la Segunda República en 1931 abrió espacios inéditos para la participación política. Clara Campoamor fue elegida diputada por Madrid en las Cortes Constituyentes y desarrolló un papel activo y reconocido por su preparación jurídica y su capacidad de debate.

Su presencia en el Parlamento fue importante por su dimensión simbólica, la entrada de las mujeres en un espacio hasta entonces masculino, y por su capacidad para presentar enmiendas, proponer textos legales y sostener argumentos que buscaban modernizar el marco normativo del país.

Propuesta de sufragio femenino

La defensa del sufragio femenino fue la cuestión central que definió gran parte de su intervención pública. En las Cortes Constituyentes tuvo que enfrentar no solo a conservadores sino también a corrientes que, por prudencia política, dudaban sobre la conveniencia de conceder el voto a las mujeres en aquel momento.

Campoamor sostuvo que la democracia exigía coherencia, no era admisible proclamar derechos universales si la mitad de la población permanecía excluida. Sus intervenciones parlamentarias se caracterizaron por un estilo directo, documentado y apasionado, que combinaba el fundamento jurídico con la apelación moral a la justicia y la igualdad.

Incorporación del voto femenino

Constitución de 1931

La Constitución de 1931 introdujo avances decisivos en materia de derechos civiles y sociales. En este marco se consagró el principio del sufragio universal que, en la práctica, significó la legalización del voto para las mujeres y su derecho a ser elegidas. La inclusión del voto fue el resultado de un trabajo colectivo en el que participaron legisladoras y legisladores comprometidos con la ampliación de la ciudadanía, en ese proceso, el papel de Clara Campoamor fue relevante por su defensa sistemática de la igualdad política como fundamento de la democracia.

Primeras elecciones con participación de mujeres

La celebración de elecciones con participación femenina cambió el panorama político. En Madrid y en otras ciudades españolas, la incorporación del electorado femenino introdujo nuevas demandas y preocupaciones en la agenda pública, obligando a partidos y movimientos a adaptar sus propuestas.

Sin embargo, la obtención del derecho al voto no resolvió de inmediato todas las desigualdades: fue necesario impulsar medidas educativas, culturales y organizativas que permitieran a las mujeres ejercer su ciudadanía de forma plena y efectiva.

Recuerdo en Madrid

Estación Chamartín-Clara Campoamor

Madrid ha mantenido viva la memoria de Clara Campoamor mediante la denominación de espacios públicos y la realización de homenajes que recuerdan su aportación. Nombrar estaciones, calles o plazas con su nombre es una forma de incorporar su figura al paisaje urbano y de hacer presente su legado en la vida cotidiana. Asociar su nombre a lugares de tránsito simboliza además la idea de movilidad social y de libertad para circular en igualdad, dimensiones que fueron parte esencial de la ciudadanía que ella defendió.

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Otros homenajes

Más allá del callejero, existen iniciativas culturales, académicas y sociales que conmemoran su vida y su obra. Instituciones educativas impulsan estudios y seminarios sobre su papel, asociaciones feministas celebran actos y los ayuntamientos patrocinan exposiciones que rescatan su trabajo parlamentario. Museos, archivos y bibliotecas han incorporado materiales sobre su obra. Estos homenajes no solo recuerdan un pasado sino que ofrecen referentes para las generaciones actuales, vinculando la memoria histórica con debates contemporáneos sobre igualdad, memoria y derechos.

Legado histórico

Tras el ascenso de regímenes autoritarios y la guerra civil, muchas figuras de la República vivieron el drama del exilio y la pérdida de espacios de influencia. Campoamor, como otros representantes republicanos, vio interrumpida su carrera política en el país y tuvo que enfrentar las dificultades del exilio. Aun así, su obra intelectual y su ejemplo ético sobrevivieron a la dispersión geográfica y fueron recuperados con intensidad en las décadas posteriores, cuando la democracia permitió reponer y valorar su contribución.

Importancia en la historia contemporánea

El legado de Clara Campoamor tiene una dimensión normativa y otra simbólica. Normativa porque contribuyó de manera decisiva a la ampliación de derechos que configuraron la modernización del sistema político español, simbólica porque su figura representa la persistencia y la coherencia de una lucha por la igualdad que no concluye con la aprobación de una ley. Su ejemplo recuerda que las reformas legales deben acompañarse de transformaciones sociales y de políticas públicas que aseguren la igualdad en la práctica. Además, la historia de Campoamor pone de relieve la importancia de las alianzas y del trabajo persistente en contextos políticos complejos: supo dialogar con interlocutores diversos y construir apoyos que facilitaron avances concretos.