

Un refugio de lujo
MAS DE LA COSTA, UN HOTEL BOUTIQUE DE 4 ESTRELLAS EN LA COMARCA DEL MATARRANA (TERUEL), ASOCIA ELEGANCIA, NATURALEZA, GASTRONOMÍA Y MOMENTOS PRIVILEGIADOS
Mas de la Costa**** nació de la rehabilitación de una masía de 1804. Está situado a 4 km de Valderrobres, al sudeste de Aragón, colindante con Cataluña. Abrió sus puertas en junio 2015 y, en 2016, fue galardonado con el Premio Roca a la Iniciativa Hotelera como mejor hotel vacacional de montaña.
El lema del Mas de la Costa es slow living, slow food. Rodeado de 23 hectáreas de olivares, campos de almendros, montañas de pinos y por unos cuidados jardines que invitan al dolce far niente, se compone de 15 espaciosas habitaciones: tres Suites con chimenea (de 50 m2), cuatro Junior Suites (de 45 m2), y ocho Dobles Superiores (de 27 a 34 m2). Cada una lleva el nombre de un poeta, reflejo de la pasión de la propietaria por la poesía. Seis habitaciones disfrutan de terraza o jardín privado.
En los diferentes salones los huéspedes pueden deleitarse de una copa de vino frente a una chimenea y gozar de un ambiente cálido. La bodega cuenta con más de 100 referencias de vinos españoles e internacionales. Una singular biblioteca, que atesora una importante colección personal de cómics franceses, una sala de cine para los niños, un pequeño spa con baño turco y sauna y una piscina exterior de agua salada (en verano) completan sus instalaciones. Con el telescopio Schmidt-Cassegrain del hotel, los amantes de la astronomía pueden descubrir cielos todavía estrellados, la Vía Láctea.
Productos de temporada
Con mentalidad eco-friendly, Mas de la Costa es el único hotel de la comarca del Matarraña que produce su propia electricidad con paneles solares. También usa biomasa para la calefacción.
Para huéspedes y para comensales no alojados, el hotel cuenta con un restaurante gourmet, dirigido por Francina Abellá, de cocina mediterránea abierta a especialidades fáneas. Ofrece una carta diaria, elaborada con productos frescos y de temporada. Bajo el porche o en la terraza, según la temporada, se puede comer o cenar al aire libre con excepcionales vistas a la curiosa formación rocosa conocida como La Caixa. Mas de la Costa resulta un inspirador enclave para empresas que quieran realizar reuniones en petit comité y de team building en plena naturaleza.
En palabras de sus propietarios, Françoise y Christian, que viven en Luxemburgo, es “el sueño de su vida”, un sueño que ha tardado 7 años en hacerse realidad. Ella, francesa aunque de padres españoles con raíces en la comarca, médico especialista en nefrología, y él, luxemburgués, PhD en Matemáticas por el MIT, se conocieron en Boston a finales de los 80. Françoise le habló a Christian del Bajo Aragón, le invitó a descubrirlo y el se enamoró de la zona. Tras cerca de 10 años buscando una masía para restaurar, encontraron el Mas de la Costa. Decidieron comprarlo y restaurarlo: “Todo se hizo poco a poco, pensándolo muy bien. Gracias a nuestros viajes, hemos descubierto culturas diferentes, y las hemos incorporado en la reforma del Mas”, afirman los dueños.