cabecera general de noticias cabecera general de noticias movil
Fecha de publicación
14 agosto 2025

La mejora vegetal en fruta dulce y frutos rojos

Autor
Rubén Casado, técnico de frutales de Anove y Raúl Domínguez, técnico de frutos rojos
Tiempo de lectura
6 min.
Secciones de la noticia

La mejora vegetal en fruta dulce y berries impulsa la sostenibilidad, la productividad y el sabor. Descubre cómo la innovación genética transforma el sector frutícola.

La mejora vegetal en fruta dulce y frutos rojos

La innovación varietal en el sector frutícola ha dejado de ser una opción para convertirse en una necesidad.

El ser humano realiza mejora genética desde que nuestros ancestros comenzaron a formar sociedades sedentarias. En ese momento, comenzaron a seleccionar semillas y plantas que cumpliesen con unas características concretas, siendo estos los inicios de la mejora vegetal. La base de este trabajo es mejorar la productividad, resistencia y calidad de las plantas y sus frutos, principalmente.

Frente a un mercado globalizado, exigente en calidad, sabor, durabilidad y sostenibilidad, el sector de fruta de hueso y frutos rojos ha apostado por una fuerte inversión en investigación y desarrollo de nuevas variedades vegetales que se adapten a las exigencias del mercado y del consumidor, además de a los nuevos desafíos climáticos. Esta profunda transformación hace que cada día cambie la manera de cultivar, comercializar y consumir frutas como manzanas, peras, melocotones, fresas o arándanos entre otros.

Afrontando nuevos retos

Durante la última década, el sector frutícola se ha tenido que adaptar a múltiples desafíos, el que más se nombra y conoce es el cambio climático, con inviernos más cálidos. Pero existen otros como la aparición de nuevas plagas y enfermedades; la demanda de frutas con más y mejor sabor, un aspecto perfecto y una presión comercial por alargar la vida útil del producto que permita minimizar el desperdicio alimentario y aumentar el tiempo en los expositores de ventas. A esto se suma la necesidad de cultivos más eficientes en el uso de recursos, en línea con una agricultura más sostenible.

En este escenario, la mejora genética y la innovación varietal se valoran como herramientas clave para ofrecer soluciones a todos estos problemas y demandas de toda la cadena de valor.

Investigación colaborativa en mejora vegetal

Institutos de investigación, universidades, empresas obtentoras y consorcios públicos-privados trabajan cada día en el desarrollo y la selección de nuevas variedades de semillas y plantas que respondan a las exigencias de consumidores, agricultores y cadenas de distribución.

Nuestro país, puntero en la innovación en mejora vegetal, cuenta con más de 75 centros de investigación tanto de empresas privadas como de centros públicos, 11 de ellos destinados exclusivamente a frutales.

Innovación en fruta dulce y berries

El segmento de frutales de hueso —melocotones, nectarinas, ciruelas, cerezas y albaricoques— ha sido uno de los más activos en la innovación varietal, registrando en los últimos años cientos de nuevas variedades vegetales.

Equilibrio entre consumidor y cadena de valor

Las empresas que desarrollan nuevas variedades buscan el equilibrio entre las demandas del consumidor —dulzura, aroma, textura— y las de la cadena —resistencia, durabilidad, menor desperdicio y producción escalonada—.

Adaptación al cambio climático

Ya existen variedades adaptadas a climas cálidos con menos horas frío, algo crucial para garantizar la brotación y floración en nuevas zonas productivas.

Avances por tipo de cultivo

Mejora genética en manzana

Programas españoles y europeos han desarrollado variedades de manzana con mejor sabor, textura, conservación y resistencia a enfermedades típicas de este cultivo.

Innovación en pera

Aunque más lenta por la fidelidad del consumidor a variedades tradicionales, también existen nuevas variedades con mejor sabor, conservación y facilidad de transporte.

Revolución en frutos rojos (berries)

Este grupo ha sido uno de los más transformados gracias a la mejora vegetal. Arándanos, frambuesas, moras y fresas han mejorado notablemente en productividad, sabor, resistencia y adaptabilidad.

Arándanos

Se han desarrollado variedades sin necesidad de frío, lo que permite su cultivo en zonas cálidas como América Latina, África y Asia. Además, las nuevas variedades tienen más firmeza y dulzura.

Frambuesas

Han mejorado en tamaño, sabor y resistencia a enfermedades. Las nuevas variedades permiten cosechas prolongadas y son compatibles con cultivos hidropónicos.

Mora

Tradicionalmente silvestre, hoy existen variedades con mejor sabor, tamaño y vida útil, facilitando su comercialización internacional.

Fresa

Uno de los cultivos con más inversión en investigación. Se han logrado variedades resistentes a enfermedades como el oídio, con más vitamina C, aroma y menor sensibilidad al transporte.

El papel de la genética y la biotecnología

Gran parte de estos avances no serían posibles sin la continua innovación en mejora vegetal y el uso de técnicas de edición genética.

Nuevas herramientas biotecnológicas

Las nuevas técnicas permiten editar genes con precisión, sin introducir elementos extraños, lo que acelera los procesos naturales de mejora y reduce tiempos y costos.

Selección asistida y genómica funcional

Otras herramientas clave son:

Selección asistida por marcadores moleculares

Genómica funcional

Ambas permiten identificar genes responsables de características clave como resistencia a enfermedades, acumulación de azúcares, color o tolerancia al estrés hídrico.

¿Hacia dónde nos dirigimos?

La mejora genética seguirá siendo fundamental para alimentar a una población creciente. La resiliencia, la sostenibilidad y la rentabilidad marcan el futuro.

Variedades resilientes y agricultura de precisión

El foco estará en variedades más resistentes al entorno, con menor impacto ambiental y adaptadas al uso de tecnologías de agricultura de precisión, permitiendo al agricultor ajustar el manejo varietal y maximizar su producción.

Conclusión: una fruticultura más rentable, sostenible y centrada en el consumidor

La innovación en variedades de frutales de hueso, pepita y berries no solo responde a exigencias del mercado, sino que representa una oportunidad única para modernizar el sector, hacerlo más rentable, sostenible y enfocado en las necesidades reales del consumidor y del planeta.