Tendencias en la franquicia en 2022
Todos los indicadores apuntan a un panorama esperanzador, para el sector de la franquicia, de cara al ejercicio 2022, en la línea ascendente registrada a lo largo de 2021.
A continuación, se ofrecen las principales tendencias que se observarán en este segmento económico, durante este año:
Primarán los negocios más pequeños, con menor inversión y más rentabilidad, propios de entornos económicos complicados, y enfocados al monoempleo y exclusivamente para la subsistencia personal del propio franquiciado. Se trata del escenario perfecto para las franquicias de servicios y modalidades de negocio que no requieran un establecimiento comercial, como se está viendo en las nuevas franquicias y desarrollos emergentes.
La franquicia capta el interés de los grandes del mercado. Se observa, como un fenómeno transversal, el interés de operadores de cierto volumen que, mediante propuestas de alto valor añadido, están incorporando a franquiciados a sus organizaciones.
Asimismo, se observa un claro impulso en el ámbito de la hostelería en general, cuyo crecimiento a ritmos elevados parece que se prolongará más allá del 2022. También crecerá, aunque en menor medida, el fitness. Aquí el concepto de gimnasio boutique domina el crecimiento en cadena, con una apuesta por la proximidad y la digitalización. Aumentarán también las actividades relacionadas con logística, salud y energías renovables.
Por su parte, el sector de la hostelería está evolucionando hacia estructuras más pequeñas, con menos personal, menores alquileres y cuentas de resultados más discretas.
El sector servicios será el gran beneficiado en 2022. No compite con las plataformas de envió de productos a domicilio, y tampoco le afectan de forma significativa las restricciones de aforo y horarios derivadas de la pandemia, por lo que se augura un importante potencial de crecimiento.
En cuanto al segmento del retail, se ha visto perjudicado por el boom de las grandes plataformas americanas y asiáticas de envío de bienes de gran consumo a casa, pero sigue funcionando el comercio minorista de proximidad, sobre todo el especializado en productos concretos.
Por último, aquellas actividades ya asentadas en el mercado serán las que mejor responderán al actual entorno económico, como lo confirman diversas franquicias ya consolidadas como agencias inmobiliarias, cadenas de transporte–mensajería o gimnasios, entre otros.