La automoción tendrá que implicar a bancos y otros agentes en nuevos modelos de negocio
El mercado de la automoción se basa cada vez más en los servicios y menos en el producto.
Los participantes en la mesa redonda sobre la Transformación de la industria del automóvil, en el marco del congreso Global Mobility Call, han llegado a la conclusión que, dado que el mercado de la automoción se basa “cada vez más en los servicios y menos en el producto”, deberá implicar en su desarrollo a bancos, aseguradoras, empresas tecnológicas, entre otros.
En la financiación de los nuevos modelos de negocio, el director general de Utility, José Puente, ha señalado que nos encontramos “en el inicio del cambio” del sistema comercial tradicional, en el que se fabrica un producto y se vende para obtener un beneficio, a otro basado en la experiencia del cliente.
“Ahora se trata de dar el mejor valor al cliente y así atraerle para que pague por los servicios asociados”, ha matizado para añadir que, aunque cambie la dinámica “siempre tiene que haber un coche”, porque, en su opinión, es el sistema de transporte “más eficiente”.
Sin embargo, ha insistido en que para que este modelo funcione tiene que haber “un modelo económico que lo respalde”, y ha citado los casos de Amazon, Tesla y Uber como ejemplos de diversificación.
En este sentido, la jefa de marketing en Stellantis Financial Services, Stéphane Levi, ha dejado claro que el nuevo tipo de cliente tiene que ser de “financiación, estar asociado al fabricante original, ofrecer flexiblidad y no exigirle compromiso”.
Respecto al nuevo tipo de empresas, el problema está, bajo su experiencia, en que el coche no esté circulando, “porque genera costes”, por lo que los ha animado a que sean atractivas tanto para usuarios jóvenes como para concesionarios y trabajadores.
El presidente de Movea VTCe, Eduardo Martín Gómez de Villalba, ha apostado por “la movilidad como servicio” y ha añadido que para que esto sea posible “todo el mundo tiene que estar implicado en un modelo sostenible, no solo desde un punto de vista ecológico, sino también económico”.
Por su parte, el vicepresidente y director comercial en el Banco Santander, Diego Gutierrez-Colomer Roy, ha ultimado que el mercado de la movilidad se centra en “el valor residual del coche”, sobre el que actualmente existe “mucha incertidumbre”.
Para él, “cuando un coche llega al final de su ciclo, hay que plantearse un segundo, un tercero y hasta un cuarto ciclo con objeto de ser respetuoso con el medio ambiente y también “cómo conjugar la movilidad” con el uso sostenible del automóvil, que “cada vez será de menor complejidad” y, por tanto, más fácilmente reutilizable.
Contenido e imagen ofrecidos por Agencia EFE