Diez claves para comprar una obra de arte.

El arte nos ayuda a embellecer nuestro entorno e ilustrar nuestras vidas, pero no solo le exigimos que sea decorativo, además le reclamamos cumplir unos parámetros de calidad y perdurabilidad, es decir que resulte una buena compra. Por ello, a la hora de adquirir una obra de arte hemos de tener en cuenta varias premisas:

1. La obra de arte tiene que enamorarnos. Y para ello no tiene que ser la mejor obra del  ercado, ni la más grande. Solamente la que a nosotros más nos ha gustado.

2. Si vamos a iniciar una colección, es importante acotar el tipo de compilación. Toda colección debe seguir una filosofía en su temática, cronología, técnica, etc., para que realmente pueda ser considerado como tal y no resulte una mera acumulación de objetos.

3. No podemos adquirir arte o antigüedades guiándonos exclusivamente por la inversión. Las obras de arte no son acciones de bolsa, ni se comportan igual, ni se crearon para ello. El elemento económico es siempre importante pero no debe ser el único. 

4. No debemos tomar decisiones precipitadas. Hay que madurar la decisión, escoger el espacio en el que se va a exponer. En definitiva, comprometerse con la obra a que se va a lucir y conservar en perfectas condiciones allá donde la situemos.

5. A la hora de comprar hemos de atender a la calidad. Una obra antigua pudo ser realizada por un artista o un artesano y la diferencia radica básicamente en la calidad. A largo plazo es mucho más reconfortante y rentable adquirir menos piezas de mayor calidad, que muchas de condición más baja. Entre otras consecuencias, veremos que se pueden conservar peor y, en su caso, no revalorizarse igual.

6. Hay que atender a la conservación de la pieza: roturas, grietas, desconchones, es la forma de asegurarse que la obra no se descompondrá al llegar a casa. Además, es un factor que influye considerablemente en el precio, sobre todo si la obra tiene desperfectos en áreas centrales o muy visibles.

7. Cuidado con las modas, pueden provocar subidas injustificadas de precios. Las ferias resultan visitas imprescindibles para reconocer tendencias futuras y adelantarse a las modas.

8. Pedir la documentación de la obra, tanto la relativa a su autenticidad con certificados, peritajes, test de termoluminiscencia, etc., como a la documentación histórica que informa sobre ella.

9. Conservar la factura de venta, actúa como certificado de garantía tanto de que la obra es lo que dice ser como de su correcta adquisición.

10. Dejarse asesorar por los expertos en cada materia y escoger el lugar de compra, son dos datos de referencia y confianza para el comprador.

Ana Vico Belmonte

UNIVERSIDAD REY JUAN CARLOS

Directora del Máster Universitario en Gestión del Mercado del Arte