El aeropuerto internacional de Palma de Mallorca elige a Locken para proteger las pistas
Locken, especialista de la llave electrónica, reafirma su presencia en las Baleares, concretamente en el aeropuerto de Palma de Mallorca.
Recordemos el papel fundamental del aeropuerto para el archipiélago, puesto que las Baleares, tan grandes como la Comunidad Autónoma de La Rioja, reciben al año una decena de millones de turistas; más que Roma o la propia Barcelona…
El aeropuerto de Palma, el tercero más importante de España, sigue por lo tanto el ritmo de los flujos estivales, y concentra en determinados días de agosto tantos movimientos como el primer aeropuerto europeo: Heathrow, en Londres.
Si a ello le sumamos que el grupo AENA, su operador (que también gestiona los aeropuertos de Madrid y Barcelona), ha retomado desde hace dos años la senda de un sólido crecimiento del número de pasajeros, es comprensible que elegir a Locken para proteger una parte crucial de sus infraestructuras en la isla tenga una importancia particularmente significativa.
Locken equipa, de hecho, el acceso al perímetro de seguridad de las dos pistas principales. Se trata sin duda de una zona de acceso reservado y altamente sensible, cuyas puertas de entrada deben permitir un acceso inmediato a los servicios de socorro en caso de accidente grave.
Las cerraduras que cierran estas puertas están provistas de los cilindros Locken. Únicamente pueden abrirlos quienes estén provistos de una llave electrónica portadora de derechos de acceso. Situados en el exterior, deben resistir unas inclemencias climáticas severas, debido a las elevadas temperaturas y la proximidad del mar.
Estas características ilustran una vez más la perfecta fiabilidad que brinda a los sistemas Locken la opción de una tecnología sin cableado: los cilindros pasivos se accionan mediante una llave electrónica inteligente que transmite a la vez energía y los derechos de acceso necesarios para abrir el cilindro. La llave comunica los datos al sistema central, y la Solución Locken permite además un control preciso y regular de la apertura de las puertas.
En Palma de Mallorca, las cerraduras Locken se utilizan también como «centinelas»: al informar de su paso por estos dispositivos dedicados, los agentes de seguridad en patrulla permiten a los responsables de seguridad comprobar el cumplimiento de los procedimientos de vigilancia. Se trata de una medida que tiene su importancia dentro del marco del refuerzo de la seguridad de los aeropuertos.
Al igual que otras grandes ciudades europeas, el ejemplo de Palma constata la capacidad de Locken de responder a las exigencias del sector aeroportuario, cada vez más rigurosas, además de su capacidad de adaptarse a las necesidades de cada uno de sus clientes.