Brother colabora con las autoridades en su lucha contra la falsificación de consumibles
Brother, que pone a sus clientes en el centro de todo lo que hace como parte de su filosofía ‘At Your Side’, trabaja estrechamente con sus socios y las autoridades para proteger a sus clientes de las falsificaciones online. En este sentido, la compañía ha llevado a cabo diversas iniciativas para luchar contra la falsificación de consumibles en la región europea.
A finales de 2019, la compañía recibió varias quejas de clientes y críticas negativas sobre los productos de la marca que se estaban vendiendo a través de Amazon. Tras meses de investigación, Brother descubrió una red de vendedores de consumibles falsificados que consiguió detener a través de una exitosa operación de redadas que llevó a cabo junto con autoridades en Berlín. Durante la redada, se incautaron miles de cajas con productos falsos, que habían imitado el packaging y hologramas de los productos originales de Brother. Además, consiguieron descubrir otros vendedores implicados en esta red criminal.
A principios de 2020, Brother colaboró en una segunda redada que las autoridades alemanas llevaron a cabo con éxito en un almacén, tras confiscar otros miles de productos falsificados, entre los que se incluían palés de embalajes replicados, cajas de productos y etiquetas falsas, y otros materiales de packaging que llevaban la marca Brother.
Brother es miembro de ICCE, la Coalición de Consumibles de Impresión de EMEA, que lleva operando desde 1997 como un organismo mundial autorizado para luchar contra los delitos que vulneran la propiedad intelectual de los consumibles de impresión. La colaboración entre los organismos y los miembros de la ICCE es lo que permite la puesta en común y el intercambio eficaz de información, proporcionando resultados en la lucha contra la falsificación.
Para evitar que sus usuarios sean engañados, Brother les recomienda comprar en plataformas y distribuidores de consumibles fiables; autentificar y verificar la autenticidad del producto en la web de la compañía; comprobar el embalaje y la calidad de la impresión; e informar ante alguna sospecha de falsificación a través de la página web de ICCE o contactando con Brother.