Entrevistamos a Pablo Ramos, el nuevo presidente del Comité Organizador de SICUR

¿Cómo valora la evolución del sector de la seguridad integral en los últimos años en España?

La seguridad siempre ha estado sujeta a un parámetro fundamental, la prevención. Es fundamental nuestra capacidad de anticipar soluciones, equipos, medidas o protocolos que aborden y minimicen los diferentes incidentes, accidentes y delitos que puedan afectar tanto a nuestra sociedad como a nuestros profesionales. 

La seguridad está cada día más presente y se hace necesaria para multitud de situaciones y tareas. Por ello, nuestras empresas e instituciones -que engloban las cinco grandes áreas de la seguridad integral: las emergencias, la ciberseguridad, el security, la seguridad y protección contra incendios y la protección y seguridad laboral- han avanzado siempre las necesidades no previstas de nuestra sociedad y de los profesionales a lo largo de los años, porque la seguridad integral trabaja desde la anticipación. 

Somos un sector de constante innovación, con grandes capacidades de desarrollo de producto o tecnológico, y tenemos que exigirnos más cada día para reducir la siniestralidad laboral, para aumentar la capacidad de medios para la lucha contra incendios de toda índole, para hacer frente a los crecientes delitos por ciberdelincuencia o para dotar de medios y medidas a nuestros cuerpos de seguridad del Estado y a nuestros servicios de emergencia en sus diferentes actuaciones.

Ante esto, no puedo olvidar la respuesta que han proporcionado y están proporcionado de forma unificada todas las empresas e instituciones que puedan englobar la seguridad integral frente a la Covid-19. Nos debemos felicitar por el titánico esfuerzo que cada parte de esta cadena ha tenido que afrontar. Sólo aquellos que nos consideramos profesionales del sector y conocemos perfectamente todo lo acontecido sabemos que todos han puesto lo máximo de su parte para ayudar y colaborar en esta terrible situación. Una situación que sigue exigiendo responsabilidad y respuesta, y que nos ha encaminado hacia nuevos retos y exigencias que deberemos asumir con el fin de proporcionar siempre la seguridad suficiente ante cualquier situación.

¿Qué grandes retos tendrá que afrontar el sector de la seguridad tras la pandemia?

Siempre existen muchos retos que deberemos afrontar pero inicialmente, y desafortunadamente para algunas empresas de nuestro sector, el principal será estudiar su viabilidad. Como muchos otros sectores laborales, algunas empresas de nuestro entorno, ya sea como fabricante de alguno de los EPI no sujetos a la Covid-19 o empresas contra incendios que vieron reducidos sus proyectos a lo largo de 2020, tendrán que actualizar sus estructuras de acuerdo a su capacidad financiera después de muchos meses sin actividad o con carga limitada de producción. Las expectativas industriales y económicas de España tampoco favorecen el optimismo.

Por eso se trata de retos tan importantes o más que los que podamos plantear desde el punto de vista de la implementación y mejora de producciones o soluciones concretas de protección que puedan innovar en cuanto a la prevención y anticipación. En este sentido, no consideramos retos diferentes “post-pandemia”, porque somos un sector que debe estar en constante reinvención de soluciones de todo tipo que ayuden a mejorar la seguridad.

¿Cómo cree que SICUR 2022 contribuirá a potenciar definitivamente la recuperación del sector y a impulsar con fuerza el negocio?

SICUR debe ser el altavoz, el canalizador e impulsor nacional e internacional de las empresas que participan en este evento. Es una de las ferias internacionales más importantes de la Unión Europea (UE) en lo que a seguridad se refiere, y debe ayudar a proyectar nuestra visibilidad y posición en el exterior de forma global, mostrando nuestra competitividad y fortaleza. Porque España cuenta con importantes empresas e instituciones que pueden liderar y están liderando en algunos casos la protección y seguridad sectorial a nivel internacional.

SICUR 2022 debe ser un evento que se distinga por su capacidad de proyección y el posicionamiento de las empresas que participan, porque debemos apostar por competir y posicionarnos en el exterior. Sólo así conseguiremos crecer y conseguir empresas más fuertes, aspecto que debería convertir a SICUR en el futuro en un referente internacional en la UE frente a otros eventos semejantes. Porque la fortaleza de una institución como IFEMA MADRID-SICUR contribuye al impulso y credibilidad de nuestras empresas en el exterior.